Cada persona es diferente y cambia con el tiempo. Mientras que algunas diferencias son inmediatamente evidentes al mirar a una persona, como el tamaño de su nariz, el color de sus ojos o su estatura, otras no lo son tanto. Lo mismo ocurre con los cambios en el cuerpo. A menudo se puede saber rápidamente si una persona ha ganado o perdido peso o si una mujer se ha sometido a un aumento o reducción de pecho, por ejemplo.
Como todas las demás partes del cuerpo, la zona genital femenina puede cambiar con la edad o como consecuencia de otros cambios en la vida de la mujer, como el embarazo y el parto. Las mujeres también suelen tener diferentes tamaños y formas de vulva y vagina, como es natural.
Si no está contenta con la forma en que han cambiado sus genitales con la edad o después de tener un bebé, existen opciones de cirugía plástica para restaurar esta zona. Dos de las cirugías de rejuvenecimiento vaginal más populares son la labioplastia y la vaginoplastia. Aunque a menudo se hace referencia a estas dos operaciones como “conjuntos”, tienen finalidades diferentes y cada una aborda una zona distinta de la anatomía femenina.
¿Para qué sirve la labioplastia?
El objetivo de la labioplastia suele ser reducir el tamaño de los labios menores, la piel que rodea la abertura de la vagina. Los labios menores pueden estirarse como consecuencia del parto o del envejecimiento. Algunas mujeres nacen con los labios menores dilatados.
Aunque a menudo las mujeres deciden someterse a una labioplastia por motivos estéticos, la intervención tiene beneficios que van más allá del aspecto puramente estético. Los labios agrandados pueden hacer que el ejercicio resulte incómodo para una mujer. También pueden interferir en las relaciones sexuales y causar irritación o molestias cuando la mujer lleva ropa ajustada o interior. En algunos casos, los labios pueden ser visibles bajo cierto tipo de ropa, lo que incomoda a la mujer.
¿Para qué sirve la vaginoplastia?
Mientras que la labioplastia tiene por objeto corregir quirúrgicamente los genitales externos, la vaginoplastia pretende tensar la vagina, la parte interna de los genitales de la mujer. Los músculos vaginales pueden separarse durante el parto, lo que crea una holgura y una sensación de laxitud en el interior. El canal vaginal también puede aflojarse con la edad.
Al igual que la labioplastia, la vaginoplastia suele realizarse por motivos estéticos, pero también ofrece beneficios que van más allá de la mera estética. A algunas mujeres les ayuda a disfrutar más de las relaciones sexuales y les permite volver a llevar tampones cómodos.
¿Qué ocurre durante el rejuvenecimiento vaginal?
Lo que ocurre durante una operación de rejuvenecimiento vaginal depende del tipo de procedimiento que elija. Durante la labioplastia, el cirujano se centra en eliminar el exceso de piel de los labios. Se suelen utilizar dos tipos de incisiones.
La primera es la labioplastia de acabado, que consiste en eliminar directamente el tejido sobrante de la zona. La segunda es la labioplastia en cuña, que consiste en extirpar un trozo de tejido en forma de tarta o triangular de los labios. La labioplastia suele realizarse con anestesia local y sedación o con anestesia general. El tipo de anestesia utilizada depende de sus preferencias y de la recomendación de su cirujano.
Durante una vaginoplastia, el cirujano plástico hace una incisión en la pared vaginal y extirpa un trozo de la pared y los músculos sueltos. El músculo restante se tensará antes de utilizar suturas disolubles para cerrar el conjunto. Al igual que la labioplastia, la vaginoplastia puede realizarse con anestesia local y sedación o con anestesia general.
¿Cuánto dura la recuperación?
La recuperación inicial de una labioplastia o vaginoplastia puede durar entre una y dos semanas. Deberías tomarte al menos el mismo tiempo libre del trabajo u otras actividades para dar tiempo a tu cuerpo a curarse. Dependiendo del tipo de trabajo que realice, podrá volver a la oficina al cabo de unos cinco días.
Aunque puede reanudar actividades ligeras al cabo de una semana o dos, hay algunas cosas que debe posponer durante más tiempo después de una vaginoplastia o una labioplastia. Por ejemplo, lo más probable es que su cirujano plástico le recomiende que espere varias semanas antes de mantener relaciones sexuales después de una vaginoplastia. También conviene esperar al menos cuatro semanas antes de volver al gimnasio o iniciar otro programa de ejercicios.
¿Se pueden combinar la labioplastia y la vaginoplastia?
La vaginoplastia y la labioplastia se centran en zonas diferentes de los genitales. Es posible combinar las dos operaciones si desea realizar cambios tanto en la zona exterior como en la interior. También se pueden realizar otros tipos de rejuvenecimiento vaginal, ya sea junto con la labioplastia o la vaginoplastia, o en solitario.
Otros procedimientos de rejuvenecimiento vaginal son la reducción del capó del clítoris, la reducción de los labios mayores y la monsplastia. Cada uno de estos procedimientos está diseñado para cambiar la forma, el tamaño o el aspecto general de una zona concreta de los genitales femeninos. Nuestra clínica le ofrece un presupuesto gratuito con toda la información sobre su cirugía íntima con nuestro cirujano. Solicite ahora su presupuesto gratuito.
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